Aqui es esta prueba no se regulo bien la plancha por lo tanto quedaron partes en blanco.
De forma delicada se retira toda la tinta con diario luego con papel mantequilla. No se arruga el papel para evitar dañar la placa.
Las partes de aluminio puro, fueron cubiertas con plástico adhesivo, para evitar que el acido lo carcoma. La partes del interior para lograr los distintos grises se dejo distintos periodos de tiempo por parte expuesta.
Se trabajo con barniz de retape y adhesivo.
Aplicación del spray para evitar que el acido lo carcoma. Se hace a distancia para evitar que este se acumule de forma irregular.
-Barniz de Retape
-Lamina de Aluminio
-Lija (metálica y al agua)
-Adhesivo
-Spray Dorado
-Punta de metal (pata hacer el dibujo)
-Acido Muriático
-Tinta Negra
-Papel Acuarela
-Papel mantequilla y Diario para limpiar
Aquí se percibe de mejor manera la explicación antes hecha. Más adelante se mostraran los pasos para llegar a la imagen final hecha en clases.
Esta técnica de grabado, debe su nombre al nombre del ácido que se emplea durante el proceso de realización de las planchas o matrices de grabado y que es el ácido nítrico rebajado con agua que se conoce como aguafuerte. La técnica de grabado aguafuerte fue desarrollada en el año 1432 por el orfebre italiano Maso Finiguerra.
La técnica del aguafuerte es una modalidad de grabado que se hace con una base o lámina de metálica, habitualmente de hierro y zinc, (o en este caso aluminio). Ésta se recubre de una fina capa de spray dorado como protector, o de cera resistente al acido muriático. El grabador dibuja con una punta cónica muy afilada en esta capa, llegando justo hasta el metal sin penetrar en él. Posteriormente se sumerge la lámina en una solución de ácido, (esto es el propio aguafuerte). Esta solución corroe el cobre en las zonas en que éste no está protegido por el barniz, y deja unos El tiempo de inmersión de la lámina en el ácido determina la profundidad de la línea en el grabado, otorgándole a mayor tiempo mayor valor.
Se retira el barniz, y la plancha ya está lista para el proceso de estampación. Se impregna la superficie con una tinta espesa que penetra en los surcos y se retira el sobrante. Se coloca sobre la plancha un papel especial, humedecido para hacerlo un poco esponjoso, y sobre él, una mantilla de lana, y se pasa por una prensa formada por una pletina de metal y dos rodillos denominada "Torculo". El papel penetra en los surcos y se impregna de la tinta, obteniéndose una imagen simétrica a la que se encuentra en la matriz. Una de las ventajas de esta técnica sobre otras es que pueden corregirse los errores, o hacerse retoques. Lo más importante es no rayar el cobre con el estilete. Si se desea borrar una línea o dibujo basta con pasar por encima un pincel con barniz, y una vez se ha secado, se vuelve a dibujar. Otra cuestión es la profundidad de los surcos, que puede hacerse mayor o menor dependiendo de la concentración y del tiempo de exposición de la plancha a la solución corrosiva.